Tic-tac que mata

Intente por todos los medios posibles detener el tiempo, no pude, fracase. Estoy perdido, cariño ¿Cuándo me dejaste, quien quedo en soledad? Cuesta comprender, el por qué, si me dices te quiero y pegas el portazo, ¿A quien quieres, le haces esto? Eres un monstruo, el error fue mío nunca debí enamorarme de alguien así, mi lado masoquista pudo más, me cegó, me engañó y me dejo desnudo e indefenso frente a ti.
Morocha el mundo no cambio, se detuvo, se freno, nos esta esperando. ¿Te alejas por el solo echo de quererme mucho?, morocha, necesitas un espejo que refleje el daño que me estas haciendo.

Son instantes, son segundos, en los que siento tu piel, como si te estuviera tocando, son pequeños días en los que el amor brota de los poros que alguna vez frotaron los tuyos, son apenas milésimas de segundos las que te veo en la calle, en las películas, en las revistas, en la vida. Todavía estás, nadie te borro. Todavía estoy, nadie me olvido.
No lo pienses, hay cosas que realmente no se piensan, se sienten. Sentime, todavía recuerdo tu sonrisa.
Acaso estas tanteando tus limites, piensas que el tiempo no pasa, pero pasa. Hoy, tu cabeza me esta borrando, la misma que me fundo, ahora me extingue, ¿no es increíble?
Ayer, no es hoy. Pero sí el hoy puede ser el ayer. No estas sola, el mundo es nuestro.

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